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La fisioterapia es una disciplina de la salud que ofrece una alternativa terapéutica no
farmacológica, para paliar síntomas de múltiples dolencias, tanto agudas como crónicas, por
medio del ejercicio terapéutico, calor, frío, luz, agua, técnicas manuales.
Su objetivo es facilitar el desarrollo, conservación y recuperación de la máxima funcionalidad y
movilidad del individuo, sin olvidar el papel fundamental que tiene la Fisioterapia en el ámbito
de la prevención para el óptimo estado general de salud.
Los tratamientos mas habituales que además son:
- Punción seca: Tratamiento invasivo de los puntos gatillo mediante el uso de agujas a través de la piel con el fin de buscar el estímulo mecánico
- Masoterapia: Técnicas manuales cuya finalidad es la de reestablecer aquella alteración que se produce en el organismo.
Dentro de la masoterapia, podemos encontrar diferentes técnicas como son amasamiento, percusión, vibración, pinzado rodado...
- Magnetoterapia: Aplicación de campos magnéticos pulsados artificales a través de una frecuencia e intensidad concreta
para producir efectos terapéuticos sobre la zona afecta
- Alta frecuencia (microonda y onda corta): Agente físico caracterizado por generar un efecto térmico en el organismo
- Rehabilitación con personal y equipamiento de alta calidad
- Electroestimulación: Aplicación de impulsos eléctricos que provocan una contracción muscular con el objetivo de restablecer la función perdida
- Electroterapia: Técnica usada en rehabilitación que utiliza agente eléctrico como medio de tratamiento
- Laserterapia: Forma especial de fototerapia que aporta dosis de energía de forma controlada a los tejidos
- Ondas de Choque: Técnica de fisioterapia (recuperación de calcificaciones y otras lesiones
mucho más rápidamente) y medicina estética (reafirmar la piel, estimular la formación de colágeno y destruir adipocitos que nos pueden
hacer perder una talla). Pincha aquí para saber más.
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En fisioterapia se trabaja con muchas otras especialidades que son imprescindibles para la recuperación de las personas en función de su dolencia.
Se trabaja muy de la mano de traumatología, medicina rehabilitadora y por supuesto de medicina general. La función de esta última es crítica porque en muchos casos
se complementa. Accidentados laborales, deportistas, personas con una vida poco deportiva, no saben que su dolencia, bien diagnosticada por el médico general
puede ser tratada por un fisioterapauta.
Concretamente en los accidentados laborales, son los médicos generales, los traumatólogos y los fisioterapeutas los que en el 95% de los casos se encargan
de su recuperación para una correcta y adecuada vuelta al trabajo.
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Las terapias del fisioterapeuta muchas veces incluyen el diagnóstico. Si bien suelen ser prescritas las sesiones de fisioterapia ya con un diagnóstico, las manos de
este especialista hacen que se pueda llegar a causas del problema o dolencia que ayudan a saber exactamente o con más precisión el problema.
Con frecuencia el fisioterapeuta se apoya en las radiografías o ecografías para un mayor conocimiento interno de la lesión o problema.
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Es muy frecuente recomendar al paciente que realice determinados ejercicios en supervisión. Estos ejercicios no sólo mejoran la recuperación del paciente
sino que permiten al fisioterapeuta evaluar esta recuperación e incluso tomar decisiones respecto a cómo tratar mejor su dolencia.
Tenemos la errónea sensación de que en el fisioterapeuta el paciente debe estar pasivo (masajes, electroterapia, magnetoterapia y un largo etcétera...)
pero esto es completamente falso ya que en ocasiones se necesita la cooperación y esfuerzo del paciente.
En niños esto no es una excepción, porque en ellos es más fácil saber lo que les ocurre ya que en ocasiones son incapaces por su edad de expresar
exactamente lo que les ocurre.
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La fisioterapia en culturas orientales se considera una especialidad preventiva, no curativa al contrario que en el mayor número de los casos en Occidente.
Esta especialidad está pensada para que las personas nunca se lesionen, no para curar a los pacientes cuando esto ya ha ocurrido.
Uno de los objetivos de Policlínicas AC
es que seamos capaces de combinar ambas ideas. La prevención es básica, especialmente en deportistas, y un fisioterapeuta puede ayudar en diseñar el ejercicio
del día a día, la intensidad de nuestro deporte y los puntos fuertes y débiles en nuestro día a día, en el aspecto físico.
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Ondas de choque
Las ondas de choque son una técnica muy útil en diferentes tipos de patologías y lesiones, primero porque son en algunos casos la única forma de abordar la lesión
y en otros casos porque son la forma más rápida de conseguirlo.
Tienen distintas vertientes, especialmente la fisioterapéutica y la estética, ambas con resultados sorprendentes.
La onda atraviesa nuestra piel (onda convergente) y llega al lugar de la calcificación, contractura o adherencia que necesitamos deshacer de una forma
muy precisa. En el caso de la función estética (onda divergente), la onda se queda en nuestra dermis para favorecer la desaparición de adipocitos y estimular
la formación natural de colágeno.
Las aplicaciones más importantes son:
- Fascitis plantar: Tratamiento más típico y con los mejores y más rápidos resultados.
- Espolón calcáneo: Al igual que en la fascitis, este es el tratamiento más idóneo para esta lesión.
- Tendinopatías de hombro: Eliminación de calcificaciones.
- Otros tipos de tendinopatías calcificantes: Al igual que en espolón calcáneo, la onda destruye la calcificación eliminando el dolor que
causa y la inflamación resultante.
- Puntos gatillo: Dolencia muscular que puede tratarse de muchas formas y esta es una de las más rápidas.
- Dolor de cadera agudo: Bajo supervisión porque los resultados no siempre son evidentes, se está investigando el beneficio de las ondas de
choque en este tipo de lesión.
- Celulitis (función estética de la onda de choque): Mediante la destrucción de adipocitos, se produce una función reafirmante que
corrige la celulitis tras pasar entre 3 y 6 sesiones de ondas de choque.
- Estimulación de la formación natural de colágeno: Como derivada de la anterior función, y sin necesidad de ser un tratamiento anti-celulitis,
la onda de choque estimula nuestra dermir para incrementar la producción natural de colágeno.
El tratamiento ideal es entre una y dos veces por semana.
Se desaconseja en pacientes con patologías cardiovasculares, tumores, neuropatías, embarazos o en niños, salvo algunas excepciones.
¿Duelen las ondas de choque? Depende de la lesión. En un espolón calcáneo es algo molesto y hasta doloroso, pero la técnica es tan rápida y eficaz, que con muy
pocos minutos, la sesión es suficiente. Además puede regularse en función de la percepción de cada paciente. En la función estética, las ondas de choque no son dolorosas.
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Sin lugar a dudas el espolón calcáneo y la fascitis plantar son las lesiones estrella de tratamiento con ondas de choque porque en muchos casos es
la única forma de tratar
estas patologías de forma completamente eficaz. Muchos pacientes pautados con diez sesiones para estas dolencias, entre la tercera y la quinta sesión se les da el alta.
Los resultados en hombros, rodillas y pies son más que satisfactorios.
Consulta a tu fisioterapeuta sobre esta técnica.
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